POR ALEJANDRO SANTANA
Recientemente un teniente coronel de la Policía Nacional fue puesto en retiro forzoso por dedicarse a “macutear”, a ciudadanos que acudían a la oficina de recepción de denuncias de la institución.
Luego que ciudadanos se quejaran, que pagaban por los servicios que allí se les prestaba y no recibían el recibo correspondiente.
Es penoso y hasta doloroso que esto haya tenido que ocurrir, que haya afectado a un oficial superior, con familia, con años en la institución.
Penoso porque ha pasado por la vergüenza pública, y doloroso porque es un ciudadano con hijos, con esposa y otros familiares que hoy deben estar afectados por esa acción.
Y aunque es una acción para lamentar, la pregunta obligada es ¿dónde están los demás macuteros?, aunque se ha dicho, que se sigue investigando.
La Dirección de Inspectoria pudiera tener la misma agilidad para seguir investigando a más de un cincuenta por ciento de sus miembros que cometen todo tipo de infracciones dentro de esas filas.
Debiera haber la misma disponibilidad, para investigar porque hay muchos agentes vinculados a los robos, atracos y otros tipos de delitos, es decir investigar la vinculación de agentes con el narco y otros males.
En esta ciudad por ejemplo hay policías que tienen, vínculos muy cercanos con los delincuentes, hay policías que prestan su arma de reglamento para delincuencia.
Hay agentes de la Dirección Nacional de “Control”, de Drogas, que están apadrinando puntos de venta de estupefacientes.
Hay agentes de esa dependencia que cobran peaje a esos operadores de punto de venta de drogas, y esa dependencia policial pudiera investigar.
A muchas personas no les gusta que estos temas se denuncien y muchos medios de comunicación no lo publican y muchas instancias policiales lo han querido poner en dudas siempre.
Pero todo eso ocurre, y ahora que se publica que se cánsela a un teniente coronel por estar matuteando y que se sigue investigando a otros es bueno que se pida que esas denuncias también sean investigadas.
Si así se hiciera, de seguro que habrían muchas cancelaciones mas y se reduciría, en un gran porcentaje los actos de delincuencia que ocurren en las diferentes provincia del país.
Lo digo porque los males de la policía no están en que haya agentes mal pagados, que se dediquen al macuteo, los males están en la paga insuficiente y en una delincuencia que se ha enquistado en la institución, haciendo daño a nobles policías.
Lo digo de ese modo porque sé que los buenos y nobles policías sufren la vergüenza de otros que son sorprendidos haciendo malas artes y se sentirían contentos si se realizan investigaciones serias que den al traste con los delincuentes uniformados.
Y no es que se sea enemigo de la institución, es que como ciudadanos, todos queremos tener una policía en quien confiar, que cuando uno vea a un agente se sienta seguro y protegido, lo que hoy, no está ocurriendo.