Orlando Martínez en la distancia
Me pregunto si vale la pena tratar de imitarte en algo... Si acaso tiene sentido volver sobre tus talones rectos y la terquedad de tus pisadas. Y recoger de la agonía aquellas huellas que plantaste para nosotros, con tu talento y tu sangre derramada…Caray Orlando, cuantos méritos en arrendamiento. Cuantas honras puestas en las vitrinas. Cuantos sabios decididos en la subastaT Cuantos sinsabores constreñidos y cuanta rabia y espantos conjugados. Cuanta basura regada. En el amargo resquicio de la palabra en oferta, vuelvo a reconocer la tuya, irremediablemente testaruda y afilada. Cómo pesaba entonces la tinta indemne de esa cuartilla libre frente a la manada.
Hoy te recuerdo por los andamios de la grandeza más simple y humana. A ti, al periodista, al hombre que dejó el pellejo junto a su palabra. Porque paraste de girar una tarde cualquiera de “los doce años” ante la más tribal emboscada. Y todo para que pudiéramos seguir nosotros la marcha de las letras, decorosa, necesaria. ¿Cómo puedo verte, entonces, y callarme en la distancia? ¿Dónde dejar atragantados los gritos de tu sufrimiento veloz y de tu causa malograda?
Hoy, 17 de Marzo, en mitad de este camino de agruras en que nos dejaste, pronuncio, escribo, estallo a favor de la tinta que adornó tu quebrado derecho a la palabra…. En la redacción perdida de tantos menesteres marchitos de este oficio, con tu oficio nos aleccionaste. Ay!, Orlando, un enrarecido grupo de atrevidos que levantan su mirada silvestre, te saludan en la distancia. Gracias, por no abandonarnos a la orfandad y al desconcierto de la “pirámide invertida” y sus desmanes maniqueos y su rutina exangüe…. Porque tu recuerdo, entre sollozos perdidos y quejidos sepultados, nos llega limpio con la luz aguerrida y febril de tu trabajo. Siempre será digno recordarte.
Sobre la crueldad de un crimen inútil y censurable, ondea brillante la pluma y la mano de un periodista incomparable!
Orlando siempre, maestro, arquetipo, acompañante!
Por: Ricardo Nieves
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario