PORALEJANDRO SANTANA
Lo correcto sería que toda la ciudadanía se integre a la lucha contra el narcotráfico, porque hacerlo sería darle un nuevo rumbo a esta sociedad, erradicando la delincuencia en todas sus manifestaciones cuya madre natural es el narcotráfico.
Las sociedades que lo han entendido de ese modo tienen menos niveles de delincuencia, viven más tranquilos y en los hogares hay más sosiego y paz.
Una sociedad libre del flagelo de las drogas, es una sociedad que indiscutiblemente aposta al futuro de los suyos, no sienten temor de que sus hijos estén en las calles, de que se diviertan sanamente, en fin que hagan vida social en cualquier escenario.
Lo correcto sería que toda la ciudadanía se integre a la lucha contra el narcotráfico, porque hacerlo sería darle un nuevo rumbo a esta sociedad, erradicando la delincuencia en todas sus manifestaciones cuya madre natural es el narcotráfico.
Las sociedades que lo han entendido de ese modo tienen menos niveles de delincuencia, viven más tranquilos y en los hogares hay más sosiego y paz.
Una sociedad libre del flagelo de las drogas, es una sociedad que indiscutiblemente aposta al futuro de los suyos, no sienten temor de que sus hijos estén en las calles, de que se diviertan sanamente, en fin que hagan vida social en cualquier escenario.
Por tal motivo veo adecuado el llamado del director Nacional de la Dirección Nacional de Control de Drogas, el mayor general Julio césar Souffron Velásquez de que todos debemos unirnos en esa lucha.
Es correcto, pero sería más correcto si los agentes de la DNCD fueran otros, más honestos, menos vinculados al negocio de las drogas y sobre todo que no fueran soplones.
Son los temores que tiene la población porque el que se ha atrevido hasta ahora acudir a cualquier ciudad a las oficinas de la DNCD ha tenido grave problemas con los narcotraficantes, pues estos los delatan.
Son muchas las quejas de ciudadanos que hasta han tenido que mudarse de sus casas a otros sectores por haber acudido a la DNCD a denunciar, un punto de venta o las acciones delictivas de quienes consumen sustancias alucinógenas.
Son muchas las veces que ciudadanos que se han atrevido a hacer denuncia contra esos personajes del bajo mundo han pasado a vivir una vida de pesadillas porque han sido chivateados por agentes de la DNCD.
Y ese es uno de los puntos en contra que tiene ese organismo en el combate y erradicación del negocio de las drogas.
Entiendo que el llamado surge en un momento en que todos los sectores son sacudidos por la violencia generada por el consumo, venta y trasiego de drogas.
¡Pero!, es lamentable que no ocurra como el mayor general souffron pide la ciudadanía, y es porque no hay confianza en los agentes de esa entidad pues la mayoría son soplones al servicio de capos.
Es lamentable que esa solidaridad por el bien de todos no se produzca, pero es debido a la ausencia de confiabilidad en esos agentes que no saben guardar la identidad de quienes se aventuran a denunciar a narcotraficantes y consumidores de drogas, ¡sería muy bueno que fuera de ese modo, pero!.......Es que hay chivatos en la DNCD.
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