El cáncer en Latinoamérica tiene aspiraciones presidenciales
En cada caso, gracias a los adelantos científicos y a la calidad de los facultativos, los gobernantes han manejado sus dolencias y vencido eventuales pronósticos dudosos
Las células malignas que produce el cáncer al parecer han desafiado las leyes de la biología para hacer metástasis contra los gobernantes de América Latina.El caso más reciente fue el de la presidenta de Argentina, Cristina Fernández, a quien los médicos de la Unidad Médica Presidencial le detectaron un cáncer en la glándula tiroides y será operada el 4 de enero próximo.
Hace dos meses al ex presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, se le conoció la presencia de células cancerosas en la laringe. Ha recibido las últimas sesiones de quimioterapia pautadas. La evolución de su salud es seguida día a día.
En junio pasado le correspondió el turno al presidente venezolano Hugo Chávez, quien en un chequeo en Cuba fue diagnosticado con cáncer en la pelvis.
Al presidente paraguayo Fernando Lugo le descubrieron la misma enfermedad en el sistema linfático, que forma parte del sistema inmunológico. Lo sometieron a seis sesiones de quimioterapia y sus médicos aseguran que los tumores desaparecieron.
Asimismo, la presidenta brasileña Dilma Rousseff luchó contra un cáncer del mismo tipo que Lugo. Para su suerte fue sometida a varias sesiones de quimioterapia y hoy los médicos la consideran sana.
Un caso extraño es el de Fidel Castro, por Cuba quien fue operado en el 2006 por supuestamente padecer cáncer, pero el médico que lo atendió aseguró que el motivo de la intervención no fue esa patología.
Ya sea por la personalidad firme que les caracteriza o el poder que los rodea, en ninguno de los casos anteriores los presidentes han muerto por los azotes del cáncer.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario