10/10/2015 12:00 AM - Héctor Linares
El Gobierno ha seleccionado entre las ejecutorias a materializar proyectos suyos y heredados
Las obras del Presidente no estarán todas concluidas antes del 16 de agosto del próximo año, cuando concluye el actual período gubernamental. De las que parecen las iniciativas más emblemáticas del Presidente, posiblemente solo una esté concluida. Otras trascenderán al actual período y otras fueron aplazadas.
La política de obras públicas aplicada por el Gobierno revela que el Poder Ejecutivo ha asumido y continuado proyectos que no figuraban en su plataforma o programa.
También muestra que una obra de años, manoseada por distintos gobiernos anteriores, pero no realizada por ninguno, la presa de Monte Grande, tampoco será ejecutada en la actual administración.
De las que se consideran “grandes obras” que han sido concluidas por la actual administración, las principales son heredadas y el Gobierno, aplicando el concepto continuidad del Estado, las ha concluido. El circuito vial del Este y la Circunvalación de Santiago se encuentran en ese grupo de obras ideadas por anteriores gobiernos.
De las “ideas de obras diseñadas” por la Administración Medina, la más emblemática por el monto que envuelve y por la trascendencia que implica, la termoeléctrica Punta Catalina, no estará lista para suplir al mercado eléctrico sus 700 megavatios antes del 16 de agosto. Según las explicaciones que han dado las autoridades de la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE), el órgano ejecutor de la gigantesca infraestructura eléctrica, la energía generada por la termoeléctrica que se levanta en Punta Catalina, Baní, estará en línea en el primer cuatrimestre del 2017. Es una obra de un costo aproximado de US$2,000 millones.
Otro gran proyecto con el sello del presidente Medina y que será inaugurado en el actual período es La Barquita, un complejo habitacional de unas 1,400 unidades o apartamentos, en el cual el Gobierno erogará unos RD$4,000 millones más RD$3,000 millones del proyecto complementario del Teleférico de Santo Domingo, un sistema de transporte que proyecta movilizar tres mil personas por hora, para desplazarlas desde y hacia cinco sectores del Gran Santo Domingo, localizados en el Distrito Nacional y los municipios Santo Domingo Este y Santo Domingo Norte. Aunque el Gobierno ha expresado interés en que la obra esté lista en el primer semestre del 2016, surgen dudas de que el proyecto pueda completarse en ese período, debido a que todavía no ha sido iniciado. Del área habitacional, el Gobierno promueve el proyecto Ciudad Juan Bosch, en un modelo de fideicomiso público-privado. De las 25 mil unidades previstas, unas 10 mil podrían estar lisas en la actual gestión.
Sí estará listo
Un proyecto que sí parece que será concluido antes de concluir el período actual, y probablemente antes de mayo, es la extensión de la segunda línea del Metro de Santo Domingo, una ambiciosa obra de transporte de pasajeros considerada como el proyecto cumbre del expresidente Leonel Fernández. El presidente Medina le ha dado continuidad a esa obra, con igual interés que en la gestión anterior. El proyecto es regenteado por las mismas personas, técnica y administrativamente.
También, dentro de las obras de diseño ajeno, el Gobierno se involucró en la recuperación e inicio del proyecto de la avenida Circunvalación de Santo Domingo, y durante este año inauguró el primer tramo y un fragmento de los tres en que ha sido dividido el segundo tramo.
El ministro de Obras Públicas indicó durante una entrevista en el Almuerzo Semanal de Multimedios del Caribe que hasta el próximo 16 de agosto, la entidad no planea la continuación de la Circunvalación Santo Domingo. “Tenemos que esperar que el tráfico se siga incrementando para que se pueda justificar el tramo III y IV”, dijo.
En el Corredor Este, obra que busca conectar el polo turístico del Este con otros destinos, incluyendo el de Santo Domingo, el Gobierno concluyó la circunvalación de San Pedro de Macorís, en el tramo San Pedro de Macorís-La Romana y Hato Mayor-El Puerto.
Dentro de los proyectos que deben ser finalizados entre finales de este año y los primeros seis meses del próximo están el proyecto de paso a desnivel de la avenida 27 de Febrero con Privada y los elevados de la Charles de Gaulle con Mella, todos obras viales para agilizar y descongestionar el tránsito en el Gran Santo Domingo. También dentro del componente vial, el Gobierno construye la carretera Miches Sabana de la Mar, para conectarla con la carretera Sabana de la Mar-Hato Mayor-San Pedro de Macorís y Hato Mayor–El Puerto.
En la región Sur la obra vial que el Gobierno tiene en proceso es la carretera Azua-Barahona, y en proyecto la Circunvalación de Baní, supuesta a iniciar a finales de año o a principio del próximo. Es una obra para el futuro.
Las obras del Sur están entre sueños y realidad
En materia de obras grandes, el Sur ha quedado rezagado en la gestión del presidente Medina. Con excepción del proyecto Boca de Cachón, una iniciativa de índole social en la cual el Gobierno se involucró desde el primer día para librar a esa comunidad de la amenaza del lago Enriquillo, los demás proyectos han tenido poco éxito. Monte Grande, el más esperado proyecto en la región Sur, está en una especie de limbo, pese a que las autoridades del
INDRHI han dicho que sería concluido en este Gobierno. Es una obra de unos US$400 millones que incluye los tres componentes básicos de una presa: agua potable, irrigación y generación eléctrica. Pero, aunque ha sido estudiada desde la década de los 60, las dudas acerca de su ejecución aumentan con el tiempo. La que se concebía como la obra cumbre del presidente Medina, la carretera Cibao-Sur, fue desestimada por cuestiones de costo beneficio, y como alternativa se optó por la reparación de una vieja vía.
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La política de obras públicas aplicada por el Gobierno revela que el Poder Ejecutivo ha asumido y continuado proyectos que no figuraban en su plataforma o programa.
También muestra que una obra de años, manoseada por distintos gobiernos anteriores, pero no realizada por ninguno, la presa de Monte Grande, tampoco será ejecutada en la actual administración.
De las que se consideran “grandes obras” que han sido concluidas por la actual administración, las principales son heredadas y el Gobierno, aplicando el concepto continuidad del Estado, las ha concluido. El circuito vial del Este y la Circunvalación de Santiago se encuentran en ese grupo de obras ideadas por anteriores gobiernos.
De las “ideas de obras diseñadas” por la Administración Medina, la más emblemática por el monto que envuelve y por la trascendencia que implica, la termoeléctrica Punta Catalina, no estará lista para suplir al mercado eléctrico sus 700 megavatios antes del 16 de agosto. Según las explicaciones que han dado las autoridades de la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE), el órgano ejecutor de la gigantesca infraestructura eléctrica, la energía generada por la termoeléctrica que se levanta en Punta Catalina, Baní, estará en línea en el primer cuatrimestre del 2017. Es una obra de un costo aproximado de US$2,000 millones.
Otro gran proyecto con el sello del presidente Medina y que será inaugurado en el actual período es La Barquita, un complejo habitacional de unas 1,400 unidades o apartamentos, en el cual el Gobierno erogará unos RD$4,000 millones más RD$3,000 millones del proyecto complementario del Teleférico de Santo Domingo, un sistema de transporte que proyecta movilizar tres mil personas por hora, para desplazarlas desde y hacia cinco sectores del Gran Santo Domingo, localizados en el Distrito Nacional y los municipios Santo Domingo Este y Santo Domingo Norte. Aunque el Gobierno ha expresado interés en que la obra esté lista en el primer semestre del 2016, surgen dudas de que el proyecto pueda completarse en ese período, debido a que todavía no ha sido iniciado. Del área habitacional, el Gobierno promueve el proyecto Ciudad Juan Bosch, en un modelo de fideicomiso público-privado. De las 25 mil unidades previstas, unas 10 mil podrían estar lisas en la actual gestión.
Sí estará listo
Un proyecto que sí parece que será concluido antes de concluir el período actual, y probablemente antes de mayo, es la extensión de la segunda línea del Metro de Santo Domingo, una ambiciosa obra de transporte de pasajeros considerada como el proyecto cumbre del expresidente Leonel Fernández. El presidente Medina le ha dado continuidad a esa obra, con igual interés que en la gestión anterior. El proyecto es regenteado por las mismas personas, técnica y administrativamente.
También, dentro de las obras de diseño ajeno, el Gobierno se involucró en la recuperación e inicio del proyecto de la avenida Circunvalación de Santo Domingo, y durante este año inauguró el primer tramo y un fragmento de los tres en que ha sido dividido el segundo tramo.
El ministro de Obras Públicas indicó durante una entrevista en el Almuerzo Semanal de Multimedios del Caribe que hasta el próximo 16 de agosto, la entidad no planea la continuación de la Circunvalación Santo Domingo. “Tenemos que esperar que el tráfico se siga incrementando para que se pueda justificar el tramo III y IV”, dijo.
En el Corredor Este, obra que busca conectar el polo turístico del Este con otros destinos, incluyendo el de Santo Domingo, el Gobierno concluyó la circunvalación de San Pedro de Macorís, en el tramo San Pedro de Macorís-La Romana y Hato Mayor-El Puerto.
Dentro de los proyectos que deben ser finalizados entre finales de este año y los primeros seis meses del próximo están el proyecto de paso a desnivel de la avenida 27 de Febrero con Privada y los elevados de la Charles de Gaulle con Mella, todos obras viales para agilizar y descongestionar el tránsito en el Gran Santo Domingo. También dentro del componente vial, el Gobierno construye la carretera Miches Sabana de la Mar, para conectarla con la carretera Sabana de la Mar-Hato Mayor-San Pedro de Macorís y Hato Mayor–El Puerto.
En la región Sur la obra vial que el Gobierno tiene en proceso es la carretera Azua-Barahona, y en proyecto la Circunvalación de Baní, supuesta a iniciar a finales de año o a principio del próximo. Es una obra para el futuro.
Las obras del Sur están entre sueños y realidad
En materia de obras grandes, el Sur ha quedado rezagado en la gestión del presidente Medina. Con excepción del proyecto Boca de Cachón, una iniciativa de índole social en la cual el Gobierno se involucró desde el primer día para librar a esa comunidad de la amenaza del lago Enriquillo, los demás proyectos han tenido poco éxito. Monte Grande, el más esperado proyecto en la región Sur, está en una especie de limbo, pese a que las autoridades del
INDRHI han dicho que sería concluido en este Gobierno. Es una obra de unos US$400 millones que incluye los tres componentes básicos de una presa: agua potable, irrigación y generación eléctrica. Pero, aunque ha sido estudiada desde la década de los 60, las dudas acerca de su ejecución aumentan con el tiempo. La que se concebía como la obra cumbre del presidente Medina, la carretera Cibao-Sur, fue desestimada por cuestiones de costo beneficio, y como alternativa se optó por la reparación de una vieja vía.
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