La joven Astrid Carolina González denunció que, hombres identificados
como policías, la despojaron de más de medio millón de pesos en
efectivo, y una suma indeterminada en cheques, así como de su vehículo.
Relató que regresaba de Azua, a donde viaja mensualmente, de cobrar
facturas del Laboratorio J. Bonó Bonó, empresa en la que trabaja como
vendedora junto a Yoraima Pérez, quien ejerce las mismas funciones en
otra compañía.
El hecho se produjo poco después de las ocho de la noche cerca del
Cruce de Ocoa. "Los delincuentes se desplazaban en una jeepeta marca
Toyota Hilander, color gris, placa G-226007, y a través de un
altoparlante le indicaron que se detuviera".
Agregó que, además, utilizaron una sirena con el sonido de las de la Policía. Subrayó que eran más de tres hombres.
"Nos apuntaron con armas. Nos hicieron desmontar de la jeepeta, y
nos obligaron a pasar a la parte trasera de su automóvil", relata.
Dijo que pidieron que le entregara el dinero y luego que accedió, dos
de los individuos encendieron su carro y la jeepeta que ocupaban
dirigiéndose por una zona montañosa.
"Nos amezaron con matarnos y les suplicamos que no lo hicieran porque
somos madres con niños que no deseamos dejar solos", expresó.
González destaca que los pillos las golpearon y luego las arrojaron
del vehículo en marcha y se desmontaron persiguiéndolas por unos
matorrales. Logró esconderse, junto a su amiga, y al no ubicarlas, los
ladrones se alejaron del lugar.
"Cuando se fueron, caminamos más de hora hasta llegar a una pequeña comunidad", recordó.
Añadió que pidieron ayuda a una persona que se comunicó con la
Policía y les facilitó un celular para que llamaran a sus familiares.
Posteriormente, avistaron la jeepeta accidentada que ocupaban los
delincuentes. En la misma, agentes policiales encontraron chalecos
antibalas y una pistola.
Astrid Carolina González hizo un llamado al jefe de la Policía, mayor
general José Armando Polanco Gómez y al comandante de la provincia
Peravia, general Juan Ramón de la Cruz Martínez, a fin de que
esclarezcan el caso.
"Confiamos en que la Policía arrestará a esos delincuentes", confesó.
Indicó que su automóvil es un Honda Civic, color negro, año 1997, placa A503792.