El Barahona de mis recuerdos



POR BIENVENIDO MATOS PEREZ
Tomado de Ecos del Sur

A mí se me llena  el alma de emociones me rebosa de ternuras el corazón cuando recuerdo los años felices de mi infancia., Cuando el pueblo era pequeño mis padres me corrigieron con dureza, porque me reí en la cara de ellos de la figura benigna., Afable y Sana de Santiago Ramírez suero, (Santiago Cunana),  Un Enfermo mental bueno, educado, tranquilo. El loco preferido del pueblo, cristiano, Respetuoso que caminaba las calles de Barahona rezando un padre nuestro. Cuando el pueblo era pequeño y sus calles eran de tierra hubo un personaje que adquirió notoriedad por sus ocurrencias, Antonio Cornielle (Diablo Viejo).

-   Vendo cangrejos, palomas de cuevas frescas y baratas.
-   Oiga usted, cangrejeros acérquese aquí.
-   Los cangrejos hieden, tienen un mal olor, están muertos.
-   Muertos no señora, están durmiendo.
-   Pero hieden.
-   Doña, los cangrejos no hieden, el que hiede soy yo, si me le va a poner defectos a mi mercancía me voy y se alejaba tranquilo por las calles de las que el creía que era dueño.

Yo recuerdo a Clodomiro Núñez y su burriquita (Dodo la puerca). Personaje al parecer muy instruido que recorrió las calles del Barahona viejo dejando una estela de bellos recuerdos en todos los que le conocieron.

-   Dado, ¿donde está la puerca?

-   En tu casa, en tu casa, la deje cocinando a tu maldita madre.
De clodominio Núñez hay cientos de anécdotas y dicen algunos que el fundo el barrio palmarito.

Es imposible que las generaciones que nacieron y se desarrollaron aquí no recuerden al profesor Carlos Lassis, conversador, hombre noble, artista consagrado que hizo del arte la razón de su vida, por sus manos paso casi la totalidad de la niñez y la juventud de la época a quienes instruyó en los talleres de arte y oficio del antiguo liceo y escuela Federico Henríquez y Carvajal o en la escuela de pintura y artes plásticas Barahona que organizo aquí en unión con la Sociedad Cultural los buenos amigos.

Otro personaje que fue objeto de la admiración desde mi niñez lo fue Pedro julio Núñez (morocota) primer teniente del cuerpo de bomberos, que solía llegar a los incendios después que el barrio los apagaba, pero era serio., Asumió su trabajo  con vocación y su estilo prendió en la juventud que creía que ser bombero era la cosa más grande del mundo.

A cual de nosotros se le puede olvidar Mario Ferreras, (Rey del Sol) yo lo recuerdo con nostalgias, con respecto y con admiración, era la época dura del golpe de Estado al Gobierno Constitucional y progresista del profesor Juan Bosch, por el que luchó con dedicación organizando la juventud Barahonera contra el golpe de estado, Mario Ferreras Sobrevivió a la Época de los 12 Años de Joaquín Balaguer.  

-Compañero Peña Gómez viene mañana, los invito al local del partido, yo soy el secretario general de la juventud revolucionaria dominicana, no faltes hay que sacar a Balaguer del gobierno.

Después andando el tiempo  lo vi. Sin su camisa blanca y la corbata negra que le identificaba, y la gente comenzó a llamarle el rey del sol, enfermó de la mente hasta el día de su muerte, fue un valor de la juventud,  Hay otro personaje de leyendas, casi mitológico, anecdótico, jovial “Don Feliz Ledesma (bombo caballo y diente) o viste encueros, hombre muy bien formado y gran comerciante, jamás tuvo una riña con nadie por deudas pese a que el  noventa y cinco por ciento de, los ciudadanos de Barahona estaban anotados como deudores de su negocio, 50% por ciento a la entrega de la mercancía y el resto como el cliente quisiera pagarlas.

Se cuenta que una vez  en el desaparecido Ingenio Barahona, Felito Ledesma entró a la oficina de pago mas de cincuentas veces en busca de un cliente moroso.

- Buenas tardes, buenas tardes ¿en que estamos con la deudita  .
 
- Don Felo dese la vuelta, por favor vuelva más tarde, minutos más tardes Don Felo volvió por el cliente, pero esta vez lo hizo girando, dando vueltas sobre su cuerpo y ante la sonrisa de todos solo decía. 
 
- Llego el trompo, Llego el trompo, Llego el trompo, de hombres como este estaba poblada la tierra Barahonera; hombres de gran integridad.

Así fue también Augusto Sueros (Muelú)

En sus mejores años hacía gala de su militancia Revolucionaria, Catorcista  siempre con Boina negra, camisa verde y pantalón negro; fue boxeador, friturero, y se cuenta que una vez la casa en la que vivía se incendio y el vecindario gritaba ¡Muelú, Muelú!, se quema la casa, corre se quema tu casa y Muelú sentado en una silla respondió - y a mí que me importa, llamen a los bomberos. Muelú es un  apodo que le viene por su amplia dentadura, su refrán preferido cuando hacia algo que no le gusta a los demás lo ha hecho popular, ¡viste lo malo que soy!


Aquí todo el que  fue a la escuela o visitó el viejo estadio Nadin Hazouri; le quedan aunque sea recuerdos de la figura Regordete, voz áspera, de corazón sano y nobleza a toda prueba de Federico olivero, (Pantaleón) el vendedor de frio frio de la ciudad, Pantaleón hombre grande, ejemplo de trabajo, bonachón, parecía un abuelo porque destilaba amor en todos  sus gestos, ¡ frio frio a dos centavos, y a veces gratis, Pantaleón vivió aquí rodeado del respeto hasta que murió en medio de grandes precariedades, su velatorio  fue un acontecimiento social, que convocó  centenares de Barahoneros que los despidieron con mucho pesar.

Son muchos los motivos que tenemos los que nacimos aquí en Barahona del sur, para sentirnos orgullosos de nuestro pueblo, el viejo estadio de béisbol Nadin J Hazouri, la cancha guarocuya, el río más breve de la Republica, Riosito, el polo magnético, los amaneceres de Barahona que dan la impresión de que Dios nos visita todas las mañanas, los atardeceré, que son como El epilogo de un día repleto de belleza de satisfacción y alegría, hacen de este pueblo un lugar especial digno de mejor suerte, ojala que un día un gobierno se acuerde que 

¡El Sur También Existe!.

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