Soy de esos soñadores y trinitarios que no quieren que se arriende su muelle



POR ALEJANDRO SANTANA

Todos vemos los avances de los pueblos desde diferentes ópticas, y a esos avances está muy ligada nuestra formación, como ciudadano, nuestros conocimientos sobre los daños y las bonanzas.

Recientemente, PROCONSUMIDOR, dio a conocer un informe que decía que la mayoría de los salamis, que consumíamos los dominicanos, carecían de calidad alimentaria y sanitaria.

Surgieron muchas voces, unos saludaron la valentía de la incumbente del organismo, pero una persona en particular, un político, destaco el daño que se hacía a los fabricantes del producto a los que se les ponía a perder “millones de pesos”.

Nunca destacó la importancia de un pueblo que debe conservar su salud, que debe alimentarse  adecuadamente, y que debe recibir la calidad del producto por el cual paga.

En esta ciudad, declarada polo turístico, nos han querido traer industrias, como los astilleros, una fábrica de cemento y ahora cementos Andino, y nos hemos levantado, “trinitarios y soñadores en contra de esas intenciones mal sanas.
Hoy se habla de usar nuestro muelle, número 6 para el trasiego de cementos, y hoy como ayer surgen visionarios, atilistas,(me refiero a Atila  el rey de los Unos), ha propagarlo como el elixir de la eterna juventud,  ó como el fin a nuestros grandes males.

Ayer luchamos para sacar a Sal  y Yeso de nuestro muelle por contaminadores; lo logramos, pasamos muchos años libre del polvillo contaminador.

Nos descuidamos y nos metieron de contra bando a KHOURY  industrial y a CEMEX, otra vez estamos saboreando el contamínate que despiden los productos que por el lugar se exportan.
Hemos protestado, pero el problema es que hemos estado divididos entre los que entienden que debemos comernos cualquier  alimento  que nos regalen al medio día, pero morir en la noche de indigestión o diarrea crónica.

Aunque  somos más los que entendemos que por el bien de nuestra salud, no debemos comernos el manjar de las doce porque viene cargado de perjuicios futuros.

Como soñador y trinitario,  soy parte de una legión de ciudadanos que mantienen la misma postura y no por capricho, sino por  conciencia ciudadana.

Habría que decir a algunos Atilas, que el arrendamiento de ese muelle 6 no puede ser y no porque entendamos que nuestro turismo debe  incrementarse por ese lugar.

El grupo de soñadores y trinitarios al cual pertenezco, estamos apoyando a unos ciudadanos que han visualizado la forma en que debemos desarrollar nuestro turismo.

Y si estamos opuestos a las compañías contaminantes no, importa como se llamen, estamos claro que estas pueden convivir con nuestros anhelos, pero en el lugar adecuado, fuera del lugar que podría ser el pulmón de la ciudad.

Habría que hacer un llamado a esos Otilas, para que tengan presentes que en esta provincia tenemos instancias formadas por honorables ciudadanos que han visualizado que  es lo que se debe, hacer para que cambiemos de vida.

No es posible que sigamos viendo como  “BUENOS”, a quienes nos traen el pan, supuestamente para alimentarnos, cuando al final lo que nos proporcionara será mucho malestar estomacal y así deben entenderlo los Atilas de nuevo cuño.

 Para edificar a quienes ya lo han olvidado, “Atila, fue un personaje de la historia un guerrero que cuando entraba a una ciudad en son de guerra, si lograba vencer, la incendiaba”, pues aplicaba la política de tierra arrasada.

Y los trinitarios y soñadores, estamos claro que esas empresas más que bien  hacen mucho daño a la salud de las personas, aunque reitero que no nos oponemos a que operen en la ciudad, pero en el lugar adecuado; es posible que a todas las necesitemos pero donde no nos hagan daño.